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La Historia

Si cada persona es una historia la de Jonathan Massiani, con dieciséis años residiendo en Miami-Dade, merece ser contada. Al llegar a Estados Unidos en el año 2002, cargaba en solitario un pesado fardo: sobreviviente de un violento secuestro debió dejar a su madre y su vida atrás, con la esperanza de iniciar un nuevo capítulo y recuperar la normalidad. Y aunque lo ha hecho con éxito, tiene una importante meta pendiente.
Aquél sorpresivo secuestro ocurrió en 1999. A sus 28 años fue, junto a su novia de entonces, víctima de nueve hombres tipo comandos que vestidos de militar, armados y cubiertos los rostros con pasamontañas, interceptaron en plena vía y con violencia el vehículo en el que viajaban. Fueron llevados a su residencia en Caracas, Venezuela, donde vivía con su madre, lugar en el que pasaría las peores doce horas de su vida, viendo a su progenitora y novia como rehenes indefensos, tuvo que negociar con los delincuentes, entregó todas las pertenencias de la vivienda, quedando él aún como garante, siendo liberado bajo amenazas en un barrio muy peligroso de la zona Oeste de la capital.
Hoy, lo más difícil es que no ha visto a su madre por 18 años, pues ni él puede salir de Estados Unidos donde tiene pendiente una resolución por asilo político, ni ella ingresar por falta de visa. Su madre no conoce a su única nieta ni a la esposa de su hijo. “Créeme que no es fácil desear abrazar y estar con mi madre, y no poder hacerlo”, dijo, “es una parte de mi vida que no está conmigo, y duele mucho, mucho.” La madre de Jonathan, sobreviviente de cáncer, vive en Caracas bajo el cuido de algunos familiares.
Sería un grave error, sin embargo, creer que las adversidades han derrumbado el carácter de Jonathan y que vive contemplando sus penas. “He aprendido que cada dificultad, cada reto y cada dolor, han sido pruebas a superar. Así lo empecé a comprender durante aquellas doce largas horas que cambiaron mi vida. Desde entonces, aunque aguardo con impaciencia el momento de estar con mi madre, y recibir el ansiado asilo político, también me he dedicado a crear y crecer como empresario y padre de familia”, reflexionó.
Jonathan se casó en Estados Unidos con María Alejandra Lugo, conocida presentadora de televisión y modelo. Milán, la niña de siete años, es el fruto de esa unión. “Llegué a este país con apenas tres mil dólares y dos maletas, mi capital de entonces. Y aunque no faltaron personajes aprovechados, supe hacer mi propio camino, destacándose en los negocios y convirtiéndose en asesor de importantes personalidades en el sur de la Florida”, afirmó. “Calidad, integridad, conocimiento, velocidad y eficiencia, son características inseparables y es lo que ofrezco desde hace casi dos décadas con mis servicios de mercadeo, relaciones públicas, consultoría, investigación de mercados, asesorías en negocios y campañas políticas. Sin ellos no se puede alcanzar el éxito”, comentó antes de introducir sus más recientes proyectos.
Massiani es presidente y director ejecutivo de Massi Group, Movex Logistic Consulting LLC, entre otras, ambas empresas enfocadas en la comunicación para hacer crecer negocios mediante estrategias creativas y uso de modernas tecnologías.
El organismo no gubernamental y no partidista, Despierta Venezuela Foundation creada por Massiani en el 2003, es otra de sus pasiones, promoviendo y defendiendo los valores, principios y derechos Humanos, a través de su ONG ha ayudado a miles de personas y esto le ha costado recibir amenazas, vigentes, por parte del régimen dictatorial de Nicolás Maduro. “Venezuela es la causa y razón, Despierta Venezuela nace por la necesidad de defender a mi país de la injusticia e impunidad. Nos debemos a ella y a todos los venezolanos en búsqueda de un mejor país. Por eso trabajamos en colaboración con un sin fin de organizaciones aliadas, locales e internacionales”, agregó. Lo más reciente de Jonathan es su entrega completa a Cristo y su devoción absoluta por ayudar a los más necesitados, para ello fundó una organización sin fines de lucro, pero al mismo tiempo se desarrolla como movimiento comunitario ( God Seven Foundation Corp ) que entre otras actividades busca unir a las iglesias cristianas, ejecutar jornadas comunitarias que ayuden a los más necesitados y vulnerables, entre otras actividades.
Jonathan Massiani tiene esta y más historias, y el aprendizaje que aporta es de esfuerzo, superación y éxitos, con la mirada y esperanzas puestas en nuevas metas por alcanzar. Entre ellas, el merecido reencuentro con su amada madre.

TEAM

Jonathan Massiani

Founder

Maria Alejandra Lugo

Co-Founder

Milan Massiani

Our Legacy

GOD SEVEN FOUNDATION

GOD SEVEN FOUNDATION is a multidisciplinary group of community GIVERS attached to 7 fundamentals
LOVE, JOY, HOPE, VALUES, PRINCIPLES, GOODNESS, GRATITUDE that govern the law of God. Our group will have several community activities where the basic premise is and will be excellence and respect for the laws of God. Our movement will bring to the community help, welfare and principles of god.

GOD SEVEN FOUNDATION es un grupo multidisciplinario de DADORES comunitarios apegados a 7 fundamentos
AMOR, ALEGRIA, ESPERANZA, VALORES, PRINCIPIOS, BONDAD, GRATITUD que rigen la ley de Dios. Nuestro grupo ejecuta varias actividades comunitarias donde la premisa básica es y será la excelencia y el respeto a las leyes de Dios. Nuestro movimiento traerá a la comunidad ayuda, bienestar y principios de dios.

Confidence.: to know that even when God calls us to a mission that exceeds our capacity, we will be able to carry it out because he will give us power to fulfill his will.
Commitment: long the way to understand which lord promises to guide us, provide us with everything we need and strengthen us along the way.
Persistence to understand that the road we travel is full of distractions, opposition and obstacles that will try to make us give up, but that Jesus deserves that we resist.
Concentration to forget what is left behind and move towards what is ahead because of the one who calls us
(Philippians 3: 3-14)
The key to succeeding in this race is a burning desire to honor Christ and reach the goal. So don't give up or settle for the immediate gratification the world offers. Understand the magnitude of the prize that awaits you and move on.
Confianza: Para saber que incluso cuando Dios nos llama a una misión que rebasa nuestra capacidad, podremos realizarla porque él nos dará poder para cumplir su voluntad.
Compromiso en el trayecto para comprender qué señor promete guiarnos, proporcionarnos todo lo que necesitamos y fortalecernos a lo largo del camino.
Persistencia para entender que el camino que recorremos esta lleno de distracciones, oposición y obstáculos que intentarán hacernos desistir, pero que Jesús merece que resistamos.
Concentración para olvidar lo que queda atrás y avanzar hacia lo que hay por delante a causa de quien nos llama
La clave para triunfar en esta carrera es un deseo ardiente de honrar a Cristo y alcanzar la meta. Así que no se rinda ni se conforme con la gratificación inmediata que el mundo ofrece. Comprenda la magnitud del premio que le espera y siga adelante.
( filipenses 3:3-14)

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